Contra viento y marea, su día llegó. Cuando Fla me escribió para contar su historia, todo simplemente fluyó. Desde nuestra entrevista, hasta cada mensajito, incluso cada paso que iban dando en el proceso de los preparativos de su boda.


Y llegó el día de planificar su sesión. De Neuquen a Bariloche, coordinamos para hacerla entre una de mis visitas al sur. Pero algo surgió y los chicos no pudieron viajar. Meses después, volvimos a coincidir. Esta vez, aprovechando la ultima horita de luz, entre risas, charlas y compaía.


Solo ellos, el paisaje y su amor.